La segunda jornada de competición llevaba los destinos del Burgos CF hasta Córdoba. Partido por todo lo alto, en un ambiente de puro fútbol, y ante uno de los históricos del fútbol español que regresaba a la categoría de plata. Mismo once respecto a la jornada anterior para los de Bolo que medían fuerzas ante un bloque bien armado en su primer duelo como local. Arranque vertiginoso, y triple tentativa en el primer cuarto de hora con dos remates de Florian, y uno de Curro tras jugada ensayada, que aproximaban el gol a la meta blanquiverde. Enfrente, los de Iván Ania buscaban atacar los espacios con velocidad tras recuperación, aunque sin fortuna en metros finales, gracias al gran hacer de la defensa visitante en las coberturas. Primeros compases para el Burgos CF, que seguía insistiendo en un juego de control y seguridad, con vocación ofensiva en posesión de balón, como demostraba en la enésima llegada, en la que Appin probaba los reflejos de Marin en una gran incorporación por izquierda.
El choque mantenía toda la intensidad, y el Córdoba CF también buscaba su tanto con ahínco. Ander Cantero salvaba con reflejos y sobre la línea un testarazo desde área pequeña, y a continuación era Calderón quien remataba fuera y por centímetros un centro cruzado de Jacobo. Calidad en las ocasiones generadas, aunque era el Burgos CF quién protagonizaba con más argumentos una disputa rica en ocasiones. Los de Bolo se mostraban contundentes en defensa, ejerciendo una gran presión sobre rival en zona medular, y atacando con velocidad los espacios a través de sus hombres de vanguardia. Frente a los blanquinegros, un rival que tuvo en Casa y Mendes a sus dos hombres más peligrosos del tramo final de primera mitad. Ambos juantero gadores protagonizaron sendos remates que acercaron el peligro a la baliza de Cantero en un final de periodo apasionante para el espectador.
La vuelta de vestuarios traería malas noticias para el Burgos CF. Una entrega imprecisa en defensa facilitaría el uno contra uno de Casas frente al meta burgalés, resuelto a favor del delantero blanquiverde, que conseguía el primer tanto de la noche. Reacción inmediata y triple cambio para la entrada de Morante, Íñigo Córdoba y Espiau, que aportarían de inmediato fuerzas y empuje para tratar de dar la vuelta al marcador. Sin modificar su apuesta ofensiva en ningún momento, el equipo de Bolo centraba esfuerzos en recuperar el equilibrio en el marcador, y optimizaba la amplitud de campo para tratar de romper por costados la pertrechada zaga local. Respuesta veloz de los visitantes que adelantaban líneas y bloque sobre terreno rival, intensificando la presión sobre un rival que gozaba en el ecuador del periodo de un premio excesivo a todas luces.
Las ocasiones se sucedían en ambas áreas, y a una gran llegada de Sancris, respondía el Córdoba CF con un claro remate de Yoldi. Partido de ida y vuelta, con protagonismo de los ataques rápidos y en pocos toques por parte de los hombres más avanzados de ambos equipos. La entrada de Íñigo Córdoba provocaría la jugada clave de la segunda mitad, con un agarrón claro sobre el extremo que supondría la expulsión clara de Lapeña, y una ocasión cristalina de gol desde el libre directo. Curro ejecutaba con maestría el lanzamiento desde la frontal, consiguiendo un golazo de bandera, incontestable y perfecto para igualar la contienda. La potencia del cuadro burgalés quedaba oficialmente desatada y, a renglón seguido, un magnífico envío de David López encontraba al espacio a Sancris que ejecutaba con precisión el duelo frente a Marin para conseguir el tanto de la ventaja.
El Burgos CF dominaba en encuentro ante un Córdoba CF combativo que no se daba por vencido pese a estar con un hombre menos y, cuando todo auguraba una victoria de los blanquinegros, el conjunto verdiblanco consiguió poner el tanto del empate a tan solo cuatro minutos del final de un descuento eterno que se alargó doce minutos más allá del tiempo reglamentario. Finalmente, ambos equipos firmaron las tablas en el marcador y el conjunto dirigido por Jon Pérez Bolo saca un punto valioso en su primera salida fuera de El Plantío.
