Dos victorias consecutivas: «Si una victoria facilita la semana, imagínate dos. Hemos conseguido sumar dos consecutivas y a partir de ahí tenemos que preparar el gran reto de Eibar con muchísima ilusión».
Reto fuera de casa: «El Eibar es un grandísimo rival y es un campo supercomplicado, pero nosotros como equipo queremos sacar nuestra mejor versión en todos los contextos. Qué mejor momento que en un campo como este y con nuestra gente, porque hemos visto que en menos de dos horas han agotado las entradas, para darlo. Va a ser difícil, pero estamos convencidos de que tenemos muchas virtudes como para sacar los tres puntos de allí».
Soñar: «Queremos seguir día a día y paso a paso. Nuestro objetivo siempre ha estado marcado. A partir de ahí, ya veremos. Nuestra ambición y nuestra ilusión es máxima. Los dos partidos ayudan a sentir más confianza en nosotros mismos. Hemos sentido que hemos hecho muchísimas cosas bien, aparte de solo sacar los resultados. Queremos ir a Eibar a eso, a seguir creciendo y encontrando buenas sensaciones como equipo. Paso a paso, porque lo siguiente no tiene sentido si no hacemos bien lo que toca, que es Eibar».
Mejor equipo en las últimas diez jornadas: «Creo que la confianza que tenemos en nosotros mismos es muy alta. La gente solo ve lo que se ve en competición, pero nosotros vivimos un día a día muy bueno, en el ritmo de los entrenamientos, en la mejoría diaria que vemos. Es verdad que llevamos una dinámica realmente buena y nos ayuda a seguir creyendo en nosotros, pero sobre todo nos consolida en la idea que queremos tener y hacia dónde queremos ir».
Punto de inflexión en Oviedo: «La derrota fue realmente dura, sobre todo porque sientes que no estás al nivel de competición que te exige el rival. Nos sentimos lejos de nuestra mejor versión. Si estamos lejos de lo que podemos dar en esta categoría no te vale para competir. Fue dura por eso, pero también nos sirvió para ser conscientes de lo que tenemos que ser si queremos estar siempre a un nivel de competir alto. También recordamos lo que pasó en los minutos finales con la gente, ya que fue realmente emocionante, y sentimos que la afición nos dio un plus que quizás no habíamos merecido ese día. Lo que eso construye es muy potente para lo que queremos obtener en Eibar y lo tenemos en la cabeza».
El rival: «Aquí llegaron dubitativos, cambiaron de entrenador e incorporaron nuevos fichajes, pero es uno de los equipos que más me ha gustado. Por mi pasado allí, después de ver nuestros partidos repetidos, es el equipo que más veces veo de la categoría. El nivel que tienen y que vienen dando es increíble. Ante el Leganés estuvieron realmente bien hasta que se quedaron con diez y luego no sufrieron en exceso. El día del Espanyol fue un accidente, porque tuvieron 80 minutos realmente buenos ante otro de los gallos de la categoría. Lo que nos vamos a encontrar es uno de los candidatos a todo, pero también tenemos muchas virtudes y hacemos muchas cosas bien. Pueden tener debilidades y las tenemos que aprovechar».
Una cita especial en un buen momento: «Siempre va a ser una visita especial, independientemente de que pasen los años, porque los más importantes en ese proceso de ser futbolista profesional los pasé allí. Mi agradecimiento hacia ellos y el cariño que los tengo es inmenso. Llevo un par de meses sintiéndome bastante bien y lo que me van a exigir ellos es un ritmo muy alto, porque es una estructura con jugadores de muchísima calidad por dentro. Eso dificulta todas las acciones de los jugadores que estamos ahí, pero sabemos lo que podemos hacer para dificultarles nosotros las cosas. Estoy convencido de que, tanto individual como colectivamente, vamos a hacer un gran papel ante todo lo que nos propongan».
Adaptación al sistema Bolo: «A los jugadores de mi posición se nos valora mucho por las acciones que llaman la atención. En mi caso, esas son de nivel defensivo y al principio de temporada, pese a que no estaba cerca de lo que yo quería ser, no tenía tantas acciones llamativas como las que puedo estar teniendo estos meses. Y eso puede hacer pensar que esté mejor o peor. Pero ahora siento que estoy siendo un jugador más cercano a lo que quiero ser. Creo que soy un jugador que he dado un rendimiento bastante estable y no creo que me costase más o menos, sino que podía hacer acciones que llamasen menos la atención, aunque aportase al equipo. En mi posición tenemos que hacer un trabajo que no se ve y eso ayuda al equipo».
